Los incendios forestales en Brasil, Paraguay y Bolivia trajeron a Argentina una cortina de humo que afectarán el color de las precipitaciones.
Se espera que este fenómeno afecte al Área Metropolitana de Buenos Aires y, al menos, a 10 provincias del norte del país, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Qué es.
La lluvia negra se produce cuando el hollín y otras partículas contaminantes en la atmósfera se combinan con la humedad de las nubes, causando lluvias que pueden tener altos niveles de contaminación.
El hollín es una partícula compuesta principalmente de carbono por la combustión incompleta de materiales orgánicos y combustibles fósiles, y puede permanecer en el aire mucho tiempo y viajar distancias considerables.
Aunque el agua de lluvia puede no aparecer negra, la presencia de hollín indica un alto grado de polución que puede perjudicar cuerpos de agua, el suelo y la vegetación.
Zonas afectadas.
Entre las provincias que experimentarán la lluvia negra, desde hoy hasta el fin de semana, se encuentran la Ciudad y Provincia de Buenos Aires, Catamarca, Salta, Jujuy Tucumán, Santa Fe, Santiago del Estero, Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones.
Alerta.
Qué hacer.
El Ministerio de Salud emitió ayer una serie de recomendaciones para lidiar con el fenómeno. Estos consejos se aplican especialmente para aquellas personas con enfermedades respiratorias crónicas, cardiovasculares, alergias, y otras condiciones de riesgo. Las recomendaciones son:
- Limitar la exposición al humo.
- Suspender las actividades al aire libre como la práctica de deportes, caminatas, etc.
- Reducir las fuentes de contaminación del aire interior.
- Mantener las ventanas y las rejillas de ventilación cerradas.
- Si se dispone de aire acondicionado, utilizarlo en modo «ventilación» o «recirculación»
- Colocar trapos o toallas enrolladas debajo de puertas y ventanas para evitar el ingreso de humo.
- Evitar fumar, porque eso aumentará la contaminación del aire.
- Si las concentraciones de humo fueran altas, no encender velas o chimeneas.
- No utilizar la aspiradora porque favorecerá el movimiento de las partículas en el ambiente.
- Manejar con precaución debido a la reducción de visibilidad, y con luces bajas.
- El uso de mascarillas adecuadas que se ajusten bien a la cara puede ayudar a reducir la exposición personal al humo y las cenizas, sobre todo a aquellas personas que deben permanecer al aire libre durante períodos prolongados debido al trabajo u otros factores.